No señores, este tipo de amor no existe, peeeeeeeeeeero sí puedes hacer algunas cosas para que este amor por lo menos sea lo más similar a lo que siempre buscaste y/o esperaste.
He aquí la fórmula maravillosa, ok no, tampoco es mágica, sí necesita muchos tamaños para lograrse, pero no es imposible.
- Es un error pretender que la otra parte sea tan feliz como lo eres tú, porque eso se lleva dentro de cada uno, no se puede cambiar a nadie.
- Debes saber respetar a la pareja, saber escucharle, saber callar cuando la ocasión lo amerita, y saber ayudar cuando te necesita sin ser un agobio para la otra parte.
- El amor debe estar unido a la amistad, debe haber confianza, que puedas sentir que le puedes decir todo sin miedo a que más tarde te lo recrimine.
- Nunca olvides que para tener una relación buena hay que empezar por una misma, aprender a conocer tu propio interior, descubrir cómo eres en realidad. Es necesario conocerse a una misma para poder aprender a conocer a la otra parte.
- No le responsabilices de cosas que tú misma no podrías hacer, eso hace que nuestra relación se convierta en dependencia y eso sólo lo alejará.
- Haz cuentas de lo vivido. Cuando sumas los días que lloras y lo días que ríes, te servirá de referencia si el amor te hace feliz o si es para ti un castigo.
- Enfrenta con madurez los problemas, por lo general las cosas se pueden solucionar hablándolas, de este modo las rencillas no llegarán a más y quedarán en una simple tontería que pasó.
- Nunca tengas miedo a hablar por temor a que se enfade, porque si eso te sucede tu relación estaría muy condicionada. No puedes andar dependiendo del humor de tu pareja para poder expresarle algo, eso no puede ser.
- Que ambos se traten con amor, que en vez de mirar a distintos lados, sea hacia adelante, juntos en todo, eso es amor del bueno.
- Jamás cedas a los chantajes emocionales, cosas como que “si tú te vas, yo haré esto”. Eso es malo para los dos y cuando hay este tipo de trato en la pareja las cosas siempre acaban mal.